Hoy no quiero escribir un poema,
porque está lloviendo en el alma.
No existe métrica para el dolor
ni ritmo que se ajuste a la tristeza.
Hoy solo quiero decir que soy yo;
que la memoria no me deja respirar
y se me atragantan los versos.
Hoy la angustia se me encoge en la palabra
y no importa si suena bien
ni voy a disfrazarla de metáfora.
Hoy...
solo quiero dejar mi baile
para esta lluvia que no cesa.
12 comentarios:
Estamos todos bajo la misma lluvia.
Mira qué acabo de poner yo hace unos minutos.
http://lanieve.ning.com/profiles/blogs/de-nuevo-la-nieve
y hoy tampoco he podido escribir nada.
¿Casualidad querido Santiago?, o tal vez, algo tan sencillo como "cercanía". Gracias por toda la que me llega de tí.
Tu entrada de la nieve, me ha gustado... aunque no hayas podido escribir "casi" nada.
Rosa...tu tiempo ahora es de reflexión, recuerdo y conseguir que ese recuerdo te empuje. Eres una magnífica escritora, pero también eres, para mi, una extraordinaria persona. La vida es la gran envoltura de la Literatura. A veces buscamos para nuestros escritos los huecos del corazón, otras las de la mente. Es dificil llenar algunos huecos. Un poema...en el fondo un poema es una nave que va desde dentro de nosotros al exterior. A veces vuelan más alto y otras más bajo. Pero nacen en nuestro interior. Las formas son menos importantes que los fondos, eso creo. Porque los contenidos nos hablan. Tu contenido hoy es un poema maravilloso, en el modo en que yo entiendo la poesía. Sin afeites vacíos, sin intentos superfluos.
Se trata de escribir, de vivir. Y para nosotros las dos cosas están cerca.
Con mi más profundo cariño.
Nos vamos reuniendo en este rincón los amigos. Me alegra ver cómo la gente te arropa en cualquier caso, Rosa.
Sobre el poema... ¡ni rechistar!. Que lo que sale del alma en forma de lluvia solo debe mirarse con mucho respeto.
Un beso. Te acompaño desde mi blog.
Rosa te traigo otro poema hecho en otra tarde de lluvia. Supera con creces lo que te podría decir.
TARDE DE LLUVIA
¡ Qué tristeza de interiores en penumbra
de tardes lentas
de álamos y lluvia !
¡ Qué tristeza de pianos en sombra,
de párpados cargados de silencio,
de estancias grandes
donde sólo se ven manos que se mueven como
plantas espectrales !
¡ Qué tristeza de cabezas soñolientas
asomándose detrás de los visillos !
¡ Qué tristeza de lluvia !
¡ Qué tristeza !
(Gabriel Celaya)
Ays las tardes de lluvia...
Yo también tengo muchas (En una usé está misma foto) y también he estado hace poco sin querer escribir un poema, sólo quería decir lo que fuera y como fuera. Pero a ti te queda mucho mejor!! jaja.
Ahora necesitas expresarte como quieras, y estoy segura de que siempre acertarás.
Un beso grande
Querida Rosa:
!Cuánta verdad, amiga mía¡ A mi me pasa lo mismo con frecuencia, pero hay que seguir bailando aunque la angustia nos llene, no sólo de lluvia, hasta de nieve, el alma.
Precioso poema. Digno de tí
Un abrazo
Valeriano
Rosita, tú no necesitas escribir un poema, como diría Bécquer, el poema eres tú, y la lluvia es el espejo del mar a gotas de tus ojos. Sabes que suelo ser visitante discreta de este espacio, pero hoy no he podido dejar de escribirte estas palabras con vocación de refugio.
Aquí estamos, gran amiga, para acompañar esa lluvia.
Un abrazo enorme
Querida Rosa. A mi entender, no hay mayor poesía que la que brota del alma; los sentimientos afloran y el resultado queda impreso en las palabras escritas. Como éstas que nos has hecho llegar al corazón.
Un beso.
Mila
Deja que la lluvia siga cayendo es inevitable, poco a poco cesará y limpiará el ambiente dejándote paz y serenidad. Te presto una frase que me dijeron mí, cuando se cumpla me la devuelves.
“Espero que poco a poco ese viento de norte se apacigüe y gire al Sur; que una tibia brisa te despeine y te arranque una mañana una sonrisa.
Necesitas, no te apresures, tiempo.”
Un beso.
Gracias por vuestro cariño, vuestros versos y por leerme.
Gracias a todos.
Precioso Rosa, pero precioso.
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