viernes, 15 de marzo de 2013























No me libro de entenderte,

de cuadrar tu insomnio con mis noches

y vivir la vida en tu traspiés.



de tu empeño en reclamar

tantas cosas que no hice,

olvidando fácilmente tanto hecho.



No me libro de ese intento vano

de conjugar tu verbo ser

con la parte más rusa de mi montaña;



de hacerte sitio en el caos

donde confluye tu trono desterrado

con mi banco de cartón.



No me libro

-y esto es tan sólo un matiz-

de seguir poniendo notas

a cada paso perdido,



porque no quiero olvidar

ese ruido que me envuelve cuando pienso,

de qué podría librarme

si no estás.

6 comentarios:

Mila Aumente dijo...

Un poema de amor original y muy bonito. Me encantó escuchártelo leer en Libertad, 8.

Un beso.

Rosa dijo...

Sabes que era para ti mi querida Mila, pero la emoción del momento se interpuso entre nosotras, así que hoy sí te lo dedico cielo, por todo el cariño que pones en leerme.

Un besazo enorme y gracias de nuevo por estar

Manuel dijo...

Es bueno, mi chica!... Muy bueno.

Reconoce que si no fuese como es, te aburrirías.

Me gusta leerte de cerca y de lejos.

Lola Álvarez Feito dijo...

Me encantó escucharlo con tu bonita voz, me encanta leerlo ahora y siempre me encantará tenerte cerca. ¡Un abrazo!

Anónimo dijo...

Rosa Temprana, parece que Enrique y yo te vamos aponer en un recital en Coslada. Elegiremos los poemas con todo el amor. Sol

carmen jiménez dijo...

Hecho de menos mis paseos por los blogs,detenerme en poemas como éste y sentir cómo la poesía nace en un corazón para morir en otro y poder resucitar.
Un abrazo apretadito Rosa.